En un suceso trágico que ha conmocionado a muchos, Dhaou Fatnass, un joven tunecino de tan solo 20 años, perdió la vida luego de participar en una apuesta peligrosa con un grupo de amigos.
La apuesta, que involucraba comer la increíble cantidad de 30 huevos crudos, tuvo consecuencias devastadoras para Fatnass. Según informes de la cadena de radio tunecina Shems FM, el joven logró consumir 28 huevos antes de comenzar a experimentar un intenso dolor de estómago.
Alarmados por la situación, sus amigos llamaron de inmediato a un médico, pero lamentablemente, la ayuda llegó demasiado tarde. Fatnass falleció en la ambulancia antes de poder recibir atención médica en un hospital.
Hasta el momento, las autoridades no han determinado las causas exactas de la muerte del joven, dejando a todos consternados y buscando respuestas sobre este trágico desenlace.
Esta tragedia sirve como un recordatorio impactante de los peligros asociados con los desafíos extremos y las apuestas riesgosas. Es importante recordar que la seguridad y el bienestar siempre deben ser prioritarios, y que las decisiones impulsivas pueden tener consecuencias devastadoras.
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